Los dispositivos de protección contra sobretensiones (DPS) se clasifican en función de su capacidad para derivar corrientes de rayo de acuerdo con determinados test de pruebas recogidos en la normativa internacional así como con el nivel de protección que proporcionan. Así, distinguiremos entre: descargadores de corrientes de rayo, descargadores de sobretensiones y descargadores combinados de corrientes de rayo y sobretensiones.
Las exigencias más altas tienen que cumplirse por la capacidad de descarga de los descargadores de corrientes de rayo y descargadores combinados de corrientes de rayo y sobretensiones que se emplean en la transición de LPZ 0A a 1 o LPZ 0A a 2. Esos descargadores tienen que ser capaces de descargar, varias veces, corrientes de rayo parciales de una forma de onda de 10/350 µs sin destruirse para evitar así la entrada de corrientes de rayo parciales destructivas en la instalación eléctrica de un edificio.
En la transición de LPZ 0B a 1 o aguas abajo del descargador de corrientes de rayo en la transición de LPZ 1 a 2 y superiores, los descargadores de sobretensiones se emplean para proteger los equipos y sistemas contra las sobretensiones. Su función es tanto reducir la magnitud residual de los niveles de protección aguas arriba como limitar las sobretensiones inducidas o generadas en la instalación misma.